¿Por qué una Casa de Medio Camino?

por Psicólogo Carlos Cavasin

El programa de medio camino es un espacio terapéutico que cumple un rol muy importante una vez culminada la internación. Constituye un paso previo a una reinserción completa a la vida familiar, social y laboral.

 

La familia ocupa un lugar importante en la contención del adicto, sin embargo, en ocasiones no está preparada para recibirlo luego de la internación. Las situaciones que se generan dentro del hogar en este proceso de cambios tan drásticos pueden ser causa de recaídas.

 

En lo que respecta al entorno en el que se mueve el adicto en recuperación, éste debe ser muy cuidado. Es recomendable alejarlo de su barrio o localidad, donde generalmente se encuentran los puntos problemáticos (grupos de amigos, puntos de venta de droga entre otros) que resultan muy atrayentes y deseados durante el proceso de recuperación. Estando en el entorno cotidiano es difícil controlar los impulsos de consumo que sufre el individuo en este tiempo. 

 

Por otro lado, la mirada de los demás es un elemento muy importante en la reconstrucción de la autoestima. Las personas que se encuentran en esta situación son muy sensibles a las críticas y juicios con connotación negativa sobre su persona, lo que impide proyectarse a futuro con otra realidad diferente a la pasada. Esto genera un universo de sentimientos e ideas que son difíciles de dominar, especialmente luego de que las emociones y deseos han sido las que gobernaron su vida llevándolo a situaciones de consumo. Es importante tener presente que al salir de la internación existen seis o siete puntos críticos en los que el individuo intenta volver a consumir; en los que toda su energía está puesta en cómo lograrlo.

 

El horario de la noche es crítico para el adicto en recuperación, ya que está solo para enfrentar las ideas de consumo y de que sólo eso puede hacerlo sentir bien. Piensa que si consume esa será la última vez, desencadenando de esta manera un nuevo fracaso. No tiene en cuenta en cada recaída, la abstinencia es más difícil de dominar. Es en este punto donde debe tomar las decisiones adecuadas, las que serán más fáciles de tomar en un ambiente de contención, que lo enfrente a las consecuencias del consumo. 

 

Recuperarse de una adicción de cualquier tipo es un proceso a largo plazo, con varias etapas. El tratamiento de las adicciones no se limita a la etapa de internación, es necesario generar espacios de acompañamiento que contemplen el acompañamiento diario durante y la reinserción gradual a la vida laboral, familiar y comunitaria. Esto puede llevar varios meses (regularmente entre seis y ocho meses). La Casa de Medio Camino brinda un espacio terapéutico que atiende todos los aspectos mencionados. A través de diversas actividades, generamos entornos seguros que sostienen al adicto durante este recorrido, compartiendo el proceso con otros que se encuentran peleando la misma batalla. 

                                                                                                                                                   Psic. Carlos Cavasin